Hola a todos:
Continuo mi serie de homenaje a los cines de la gran vía, con el cine (hoy teatro) al que mas cariño le guardo. El Cine Gran Vía.
En este cine aprendí esta maravillosa y mágica profesión de proyeccionista, de las manos de José Gálvez Ventura (hoy jubilado), anterior y ultimo Jefe de Cabina que tuvo el cine. Posteriormente volvimos a trabajar juntos en la nueva etapa del Cine Proyecciones como multisala, hasta que se jubilo.
El estuvo muchos años al frente de esa estupenda y emblemática cabina de proyecciones, por la que han pasado grandes actores y directores de nuestro cine, ya que esta sala siempre albergo las principales premieres de cine tanto Español como extranjero.
Por lo tanto este articulo va dedicado a el, que menos.
Os paso a contar su historia….
Emplazado en el nº 66 de la Gran Vía, se inaugura el 21 de agosto de 1944, con el film “Saludos, amigos” de Walt Disney.
Contaba con 1018 butacas entre patio y entresuelo y la pantalla media 5,30 x 4,30 metros.
Siendo sala de estrenos y sesiones numeradas.
Propietarios: Enrique Patuel, posteriormente su hijo Vicente Patuel, la distribuidora CIC, y por ultimo Cinesa, filial de Paramount Universal en aquel momento, hasta su venta a principios del 2000 para transformarlo en sala de teatro.
Cabe destacar, que durante un tiempo el Cine estuvo programado por Cesáreo González.
Su cabina de proyección estaba equipada originalmente con Proyectores Zeiss Ikon, y linterna Philips, posteriormente para el inicio de proyecciones en formato 70mm. se instalaron dos proyectores marca Prevost (bi-formato 35-70mm.) con linterna Wextern y equipo de sonido magnético (esta instalación la realizo la casa Técnica Electrónica, distribuidor en aquel momento de Prevost), también se instalo un plato de largometraje marca Christie, y posteriormente con el avance de la tecnología de sonido, se instalo un procesador de sonido Dolby Cp65 mas lectores de sonido Dolby Digital, SDDS, y DTS.
ASPECTO GENERAL DE LA CABINA
PROYECTOR PREVOST
RACK DE SONIDO, INTEGRANDO TODOS LOS SISTEMAS DE SONIDO DIGITAL
SALA DE MONTAJE
Al inaugurarse su segunda sala, se instalo en la misma un proyector Victoria V y plato sin-fin Cinemeccanica, junto con un procesador de sonido Dolby CP65 mas un lector de Dolby Digital, y un programador para automatizar las funciones de la cabina, de carta perforada.
Dato curioso de este cine , que contaba con una pequeña sala de pruebas arriba junto a la cabina de proyecciones de la sala principal. Esta sala de pruebas contaba con dos proyectores Enermann, con linternas de carbones.
Su empresario por aquel entonces, Enrique Patuel la hizo construir para ver películas junto a familiares y amigos los fines de semana, también se organizaban pases privados entre los que asistían criticos de cine, políticos y personalidades de la época.
PROYECTORES CORRESPONDIENTES A LA SALA DE PRUEBAS
Ocupo parte del mercado de los mostenses. En su apertura, se considero como uno de los mejores de Europa, agregando la seriedad y la comodidad del estilo ingles al señorial tono español y a la suave corriente mediterránea y romántica.
Su coste fue de 6.000.000 millones de pesetas de la época, y solo en la lujosa decoración, en maderas ricas, cristalerías y pinturas, se gastaron 3.300.000.
Los lienzos de la sala estaban pintados por Eduardo Vicente; el techo del vestíbulo, por el artista Stoltz, y iluminando la sala una preciosa araña de cristal de bohemia.
Las demás lámparas eran de fabricación nacional. Ademas de mármoles procedentes de India, maderas procedentes de Guinea y bajorrelieves, poseía hermosas alfombras, sofás, jarrones, etc.
Cuando Cesáreo González se hace cargo de la programación de la sala, es para exhibir, en exclusiva, las películas de su marca, Suevia Films.
Entre sus estrenos de mayor importancia, causo gran impacto “Recuerda”, de Alfred Hitchcock, con siete semanas de proyección, en 1946; “Mariona Rebull”, que permaneció en cartel del 22 de mayo de 1947, después de seis semanas de éxito, como igualmente “Los Ladrones somos gente honrada”, en el 56, o la opera prima de Julio Diamante (el 14-9-64), muy premiada en el festival de Valladolid, “Tiempo de Amor”, “Mash”, que se mantuvo ininterrumpidamente, desde el 4 de octubre del 76, hasta el 28 de Marzo de 1977.
Las películas “Calle Mayor” y “Muerte de un ciclista”, ocuparon su pantalla, 28 y 38 días respectivamente.
En Septiembre de 1994, se inauguro una segunda sala, con 301 localidades, en la planta sótano, justo donde estaba ubicada una sala de fiestas, la que contaba con algunos reservados, para personalidades del antiguo régimen franquista.
En esta obra no se modifico la sala original ni otras dependencias, conservando su gran esplendor.
A Principios del 2000, ceso su actividad como cine y paso, al igual que la sala 2 a funcionar como teatro, y asi sigue en la actualidad.
FACHADA EXTERIOR DE LA SALA
VESTIBULO DE ENTRADA
EXTERIOR EN LA ACTUALIDAD
ASPECTO GENERAL DEL INTERIOR DE LA SALA
CURIOSO ARTICULO
ANUNCIO EN PRENSA
MARQUESINA, ANUNCIANDO LAS PELICULAS DE LAS DOS SALAS
Buenas Alberto,
ResponderEliminarEnhorabuena por tu proyecto. Estoy desarrollando un proyecto de la misma temática aunque solamente gráfico, fotografiando los antiguos cines que quedan en mi tierra, Mallorca. Si estás interesado podemos intercambiar enlaces. Te dejo la dirección para que puedas echarle un ojo (solamente está en catalán):
projectesessiocontinua.wordpress.com
Un saludo.